Cien horas de pedaladas

Exhausto, casi sin aliento, pero con la satisfacción de haber conseguido cubrir su reto, recorrer los 1.940 kilómetros que separan Venecia de Cartagena. Lo hizo por una buena causa: recaudar fondos para la Asociación de Padres de Niños con Déficit Auditivo (Apanda), donde su hijo Mario, con discapacidad auditiva, asiste para recibir tratamiento y atención. Entre decenas de vecinos y sobre una alfombra azul José Antonio Conesa cruzó la meta situada en la plaza del Ayuntamiento, pasada la medianoche, rodeados él y su equipo por un buen número de seguidores que a esas horas se agolpaban allí.

Minutos antes pasó por su pueblo, El Albujón, donde sus vecinos le rindieron un cariñoso homenaje bajo la pancarta de la línea volante. Allí paró dos minutos y sin apenas descansar siguió hasta Cartagena acompañado ya en esos momentos por una veintena de ciclistas.

El cansancio, el agotamiento y las ganas de llegar se notaban en su cara. Y es que han sido muchos los inconvenientes con los que se ha encontrado este intrépido deportista de fondo. El primero de ellos fue nada más comenzar su ruta, el pasado jueves en Venecia. Allí se encontró con más de 40 grados de temperatura, que tuvo que soportar durante varios kilómetros. Y de repente, a su llegada a los Alpes, el termómetro descendió hasta los 10 grados.

Frío y viento

Al frío y al intenso viento sumó entonces un imprevisto bajando la montaña: un desvío de ruta. Para volver a ella tuvieron que hacer 26 kilómetros más de lo previsto. «Menos mal que nos lo dijeron los internautas», comentó su preparador y amigo, Ramón Cegarra.

Donde más problemas encontraron fue a su paso por el Delta del Ebro, donde las fuertes rachas de viento casi tiran de la bici en varias ocasiones a Juan Antonio Conesa.

Si el de Tarragona fue uno de los momentos más duros, el de Castellón brilló por la emoción. Allí vio por sorpresa a su hijo y a su esposa, que fueron a darle ánimos. Juan Antonio Conesa los necesitaban después de tantas horas sin descansar. Ha hecho una media de 400 kilómetros al día en 18 horas de pedaleo por jornada.

Pero este peluquero de profesión, de 31 años de edad, no estuvo solo. Además de su equipo, a partir de Castellón le empezaron a acompañar ciclistas, cuyo grupo aumentaba conforme pasaba por los pueblos de su ruta. El fin de fiesta fue espectacular, por el apoyo recibido a su llegada a Cartagena a pesar de las altas horas.

Juan Antonio Conesa ha logrado recaudar alrededor de 10.000 euros entre los patrocinadores, un dinero que se destinará íntegramente para el mantenimiento de la asociación, cuya presidenta, Dolores Sánchez, confesó que durante la tarde de ayer rompió a llorar en varias ocasiones de la emoción por la hazaña que había conseguido el deportista.