A 'Pegasus' le sale competencia

Alejandro, a sus 17 años, es un 'crack' informático, y Juan Carlos, empresario de 34 años, es quien se encarga de financiar sus ideas. A partir de ahí, «se ha juntado el fuego con la pólvora», como ambos subrayan, para idear un radar con el que pretenden hacerle la competencia al mismísimo 'Pegasus': el nuevo helicóptero que la Dirección General de Tráfico (DGT) presentó durante la pasada operación especial de Semana Santa, para medir desde el aire la velocidad a la que circulan los vehículos por las carreteras españolas.

Por lo pronto, el radar que han ideado Álex y Juan Carlos se impone por mucho en lo económico al dispositivo 'Pegasus', ya que el velocímetro de estos dos murcianos tiene un coste de 60 euros, frente a los 60.000 euros que le supone a la DGT cada aparato (elevándose a 170.000 euros su instalación en el helicóptero). En cuanto a las prestaciones técnicas, está diseñado para adaptarse a las motocicletas de la DGT: «Apenas pesa unos gramos, se autoabastece con la batería de la moto y mejora en un par de segundos la velocidad de disparo de los radares convencionales de Tráfico», según cuenta el empresario lorquino.

Todo ello, gracias a un monitor LCD de siete pulgadas que se instala en el manillar de la motocicleta, cerca del velocímetro, y que es el encargado de recibir la información que le van facilitando en tiempo real tres microcámaras situadas en los faros delanteros. Si el 'Pegasus' mide desde el aire excesos de velocidad de hasta 360 kilómetros por hora, el radar patentado en la Consejería de Cultura por Juan Carlos Viñegla, el pasado 26 de marzo, puede llegar a detectar excesos de 260 kilómetros por hora.

«Hemos utilizado un 'software' similar al del helicóptero de tráfico, y le hemos aumentado el zoom gracias a una aplicación de la cámara de fotos del iPhone, que sirve para fijar el objetivo en la matrícula y evitar que la imagen salga borrosa», según detalla Alejandro, el informático. Con solo 17 años, su identidad debe de permanecer en el anonimato, debido a que colabora con la Guardia Civil desde octubre de 2010. Fue entonces cuando un grupo de Delitos Telemáticos se desplazó desde Madrid hasta Murcia para descubrir que un 'zagal', de 14 años, era el 'hacker' que había dejado en evidencia el sistema informático de un gran centro comercial de la ciudad.

Con esa edad, Álex se valió de su portátil para adentrarse en la base de datos de la firma y hacer saltar las alarmas de la sección de complementos y joyería.

Lo pillaron porque «las cámaras me grabaron tecleando el portátil por el centro». Como se suele decir, el joven informático se cayó con todo el equipo, pero este incidente permitió que la Guardia Civil encauzase su talento innato: ya ha sido capaz de diseñar un videojuego,varias aplicaciones para móvil y en 2012 se alzó con un campeonato mundial de seguridad organizado por Microsoft.

Tras la 'gamberrada informática' en el centro comercial, le empezó a picar el gusanillo policial e ideó un prototipo de cámara «para grabar persecuciones». Pero al potencial creativo en I+D+i de Álex le seguía faltando financiación, y ahí apareció el azar para conocer al empresario.

«Tenía mi ordenador roto y un amigo me habló de Álex; lo arregló al momento. Le facilité los medios para desarrollar su idea y lo hizo en cinco meses. Ees un genio. Para mí es un hermano pequeño y he puesto toda mi confianza en él», sostiene Juan Carlos. Así ha sido. Este particular tándem empresarial ya ha alumbrado su primer invento. Que tiemble 'Pegasus' porque los 'genius' murcianos ya están aquí.