La UPCT aplaza pagos y proyectos por la deuda y teme más recortes

El retraso de la Comunidad Autónoma en los pagos relativos a los presupuestos no ya de este año, sino del pasado, ha llevado la preocupación a la Universidad Politécnica de Cartagena (UPCT) por las consecuencias que esa demora está teniendo en el abono de facturas a proveedores, la congelación de proyectos de infraestructuras emblemáticos y el posible recorte en el dinero comprometido para 2011. El 'agujero' de algo más de 25 millones que la administración regional debe afrontar con la institución docente ha llevado ya al Consejo Social de la UPCT a alzar públicamente su voz para advertir de esta complicada situación financiera.

En un comunicado, el presidente de este órgano de participación de distintas instituciones y colectivos de la ciudad en la UPCT, Juan José Pedreño, ha manifestado la «preocupación» del Consejo «por la situación actual que atraviesa la Universidad desde el punto de vista financiero» y ha mostrado «su disposición a colaborar en todo momento con el Rectorado y con la Comunidad Autónoma de la Región de Murcia, al objeto de intentar solucionar dichos problemas». Los atrasos se concretan en 21,7 millones de euros que debe liberara la Consejería de Hacienda a través de la Tesorería, y que permitirán cumplir obligaciones por ejemplo con las empresas que participaron en la rehabilitación del antiguo Cuartel de Instrucción de Marinería (CIM), ahora sede de la Facultad de Ciencias de la Empresa; y 3,6 millones de euros comprometidos por la Consejería de Universidades para contratos-programa y otras cuestiones, como gastos de funcionamiento de la biblioteca o relacionados con el software informático.

Como el embudo se refiere a las inversiones de 2010 -los gastos de personas están cubiertos y no ha habido ni se prevén problemas respecto al pago de las nóminas a los trabajadores-, la incertidumbre se extiende a qué pasará con lo presupuestado por la Comunidad para este año.

Al elaborar sus presupuestos, la Universidad se ha apretado el cinturón en torno a un 5%, pero ha incluido un amplio capítulo de infraestructuras que exigen de la Comunidad desembolsos ya pactados. El principal ejemplo es que la Universidad tuvo que 'congelar' ya en otoño el proyecto de construcción de la sede de la Escuela de Arquitectura e Ingeniería Civil, valorado en unos 20 millones de euros. Dieciocho estudios de arquitectura de toda España se presentaron al concurso de ideas convocado para elegir el mejor diseño posible para un inmueble que se levantará frente a la Asamblea Regional.

No afecta a las nóminas

Afortunadamente, otros proyectos clave de infraestructuras tienen asegurada la cofinanciación regional, como la fase final del Edificio de Laboratorios Docentes y de Investigación (ELDI), que se ubica junto a la plaza de toros; y la sede de la UPCT en el Parque Tecnológico de Fuente Álamo.

Asociados al programa de Campus de Excelencia Internacional, la Universidad también quiere acometer la reforma del cerro de San José y del antiguo Club Santiago, con obras como cubrir la piscina y construir apartamentos para investigadores. Los fondos propios que genera la institución -por ejemplo con las tasas de los alumnos- y las aportaciones de otras administraciones respaldan los proyectos, pero la financiación regional es esencial puesto que supone el 60% del presupuesto de inversiones de la UPCT. «Esperamos que esta falta de liquidez de la Comunidad sea transitoria», destacó ayer el secretario del Consejo Social, Gregorio García.