Veterinaria estudiará el caso de un conejo con los testículos hiperdesarrollados

A Antonio Giménez, a sus 71 años, pocas cosas pueden sorprenderle ya. Sin embargo, un descubrimiento reciente le mantiene desconcertado. Una de sus aficiones es la cría de conejos y un ejemplar de 9 meses, apartado para las labores de padrear y bautizado como 'Rufino', posee unos testículos desproporcionados para su especie. Según Antonio, este reproductor ha fecundado ya varias camadas desde temprana edad con total normalidad, lo que, a su juicio, «viene a descartar que el animal esté enfermo o padezca cuando copula». De todas formas, y debido a esta singularidad, Antonio y su familia han cogido cariño a Rufino y están dispuestos a asegurarse de que el animal no sufra o pudiera sufrir en el futuro. Por eso, han iniciado contactos con especialistas de la Facultad de Veterinaria de la Universidad de Murcia para que, en las próximas semanas, visite las instalaciones y se le practique una exploración. 'La Verdad' ha consultado con varios veterinarios para que emitieran su opinión sobre el origen del tamaño desmedido de los genitales y han coincidido en que sin hacer una ecografía «todo es especular, pero puede ser una malformación congénita o una patología que no esté teniendo consecuencias graves para el animal».