

Secciones
Servicios
Destacamos
G. C.
Domingo, 18 de abril 2010, 03:33
No estaba en su discurso. Valcárcel improvisó en el atril, algo a lo que acostumbra, pero esta vez subió tanto el tono habitual de sus proclamas en defensa del Tajo-Segura, que encendió a los cientos de invitados que asistían anteanoche en Torre Pacheco a la clausura de la asamblea general de la Federación de Cooperativas Agrarias (Fecoam). «Murcia se levantará en armas, conmigo a la cabeza, si nos cierran el Trasvase», vino a decir. Era el colofón a una semana de gran tensión política por la incertidumbre que acecha al Tajo-Segura, con la dimisión del presidente de la Confederación Hidrográfica incluida, y la víspera de otra, la próxima, en la que los regantes volverán a manifestarse en las calles de Murcia, y el futuro del acueducto seguirá dilucidándose en el Congreso de los Diputados.
La contundencia del presidente de la Comunidad Autónoma calentó sorpresivamente el ambiente en el hotel Intercontinental, donde los cooperativistas se disponían a compartir una cena después de su congreso. A los dirigentes socialistas presentes en el acto, sin embargo, los dejó helados; allí estaban el delegado del Gobierno, Rafael González Tovar; el secretario general del partido, Pedro Saura, y Charo Quesada, la secretaria de Agricultura en la Ejecutiva y, con toda probabilidad, próxima presidenta de la Confederación Hidrográfica del Segura.
González Tovar fue precisamente el orador que precedió a Valcárcel, y quien despertó al mitinero que el presidente lleva dentro. Leyó un discurso de corte institucional, de cinco folios, en el que recordó los compromisos del Ejecutivo de Zapatero con el campo y enumeró las seis medidas del Plan para la Mejora de la Financiación del Sector Agrario. Alguno de sus pasajes debió de incomodar a Valcárcel, quien confesó en voz baja a Santiago Martínez, el presidente de las cooperativas, sentado a su lado: «Esta noche voy de torero, Santiago, éste no se me escapa», según el relato a 'La Verdad' de otro integrante de la mesa presidencial.
Dicho y hecho: Valcárcel subió a la tribuna y, aunque sin aludir a González Tovar, se quejó sin embargo de que de la intervención de éste pudiera deducirse que el Gobierno de Zapatero apoya más a los agricultores que la Comunidad Autónoma, elogió la competitividad de los productos murcianos y recordó la necesidad de agua que sufren. Y, entre una mención al agua y la defensa cerrada del Tajo-Segura, no había ya solución de continuidad: «Murcia se levantará en armas...». Algunos cooperativistas relatan que pronunció estas palabras fijando su mirada en el delegado del Gobierno.
Testigos presenciales han asegurado a esta Redacción que González Tovar y Saura abandonaron entonces el hotel, contrariados por las palabras y el tono de Valcárcel, pese a que previamente habían confirmado a la federación de cooperativas, a través de sus colaboradores, que se quedarían a cenar. Ambos negaron ayer a 'La Verdad' este extremo; de hecho, el delegado del Gobierno acudió después a la gala del deporte paralímpico en San Javier, y Pedro Saura asegura que tenía un compromiso privado, razón por la que se marchó a casa. También Valcárcel se fue, como tenía anunciado.
Charo Quesada se quedó hasta el final en el hotel de Polaris, donde cooperativistas e invitados no hablaban ya de otra cosa.
Publicidad
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.