«El resultado nos da igual...»

«Alcohol, alcohol, alcohol, alcohol, alcohol... Hemos venido a emborracharnos, el resultado nos da igual...». La cancioncilla juvenil, convertida ya en un clásico en el Bando de la Huerta y, por ende, en cualquier botellón, es digna de análisis. Lo suyo es alcanzar el 'punto' rápido y seguir bebiendo hasta que el cuerpo aguante. Porque el resultado -mareos, vómitos, caídas, disgustos- les da igual. El alcohol es el protagonista indiscutible de la fiesta. El dispositivo sanitario no daba abasto. Dos ambulancias llegaron a coincidir en el mismo sitio para atender una intoxicación etílica, lo que demuestra la destreza de los servicios sanitarios. Pese a todo, y aunque el alcohol sigue siendo 'el rey', las intoxicaciones tienden a bajar. ¿Espejismo o realidad? En total, hasta las 20.30 horas, el número de atenciones sanitarias se habían reducido en 40, llegando a las 120 por las casi 160 del año pasado, según fuentes del Centro de Coordinación de Emergencias de la Región. De las 66 asistencias acumuladas, diez de ellas requirieron traslados a un hospital.

Entre el mediodía y las seis de la tarde, se produjeron 51 intoxicaciones etílicas, siete traumatismos, dos mareos y otras dos agresiones, ninguna de carácter grave.