La Policía detiene a nueve rapados de ultraizquierda por atacar a neonazis

Llevan la cabeza rapada, como sus más acérrimos enemigos, los neonazis, pero son radicales de ultraizquierda. Se autodenominan sharperos, de las siglas SHARP (Skin Heads Againts Racial Prejudice; esto es, Skin Heads Contra los Perjuicios Raciales), pero no le andan a la zaga a los clásicos rapados de ultraderecha en lo que a la utilización de la violencia se refiere.

Ahora, agentes de la Jefatura Superior de Policía de Murcia, pertenecientes a la Brigada Provincial de Información, han desarticulado la cúpula de esta organización con la detención de siete de sus más destacados miembros, así como de dos menores de edad, a los que se imputaban delitos de lesiones, contra los derechos fundamentales y daños. Fuentes judiciales confirmaron que los sospechosos fueron puestos ayer por la tarde a disposición del juzgado de guardia -el de Instrucción 7 de Murcia- y que, una vez que se les tomó declaración, quedaron en libertad con cargos.

Los siete mayores de edad tienen entre 20 y 30 años y están considerados líderes de ese grupo, mientras que de los dos menores nada ha trascendido.

Las detenciones se produjeron a raíz del ataque sufrido por varios neonazis en un bar de Murcia, ocurrido hace unos días. Después de golpear a algunos de sus rivales, los sharperos se retiraron, pero un tiempo más tarde volvieron a localizar a dos miembros de la tribu rival, que viajaban en un coche junto a sus respectivas novias.

Los rapados de izquierda se lanzaron contra el vehículo, armados de cadenas y bates de béisbol, y lo destrozaron completamente. Los daños causados en el coche se calculan en varios miles de euros.

Miembros del Servicio de Información de la Policía Nacional, que se encargan del control de los grupos de ideología extremista -además de investigar la actuación de grupos terroristas-, consiguieron localizar y detener horas más tarde, en distintos puntos de Murcia, a nueve sharperos sospechosos de haber participado en el ataque.

Hace ahora un año, la Policía ya detuvo a 16 de estos rapados de extrema izquierda por haber asestado una brutal paliza a un neonazi, quien a consecuencia de la agresión sufrió múltiples fracturas y tuvo que ser hospitalizado en estado grave. Este tipo de grupos ultras están actualmente en auge.