Tropezón del Grupo 2002 ante el Cantur (2-3)

El Grupo 2002 no aprovechó la magia del Príncipe de Asturias para dar un paso de gigante en su mano a mano con Hotel Cantur en la lucha por la gran final.

Se preve un duelo de infarto en el partido de vuelta, para donde las murcianas esperan llegar aún con fuerzas. Y es que la derrota duele, sobre todo, después de ver el magnífico ambiente que se vivió en el feudo murciano.

Las chicas de Pascual Saurín agotaron todos sus recursos, en especial en ataque, ante el buen momento de forma de las canarias. La presencia de Priscilla Rivera varió la apuesta murciana, ya que Saurín quiso sorprender tácticamente a Camarero y darle un salto más de calidad al equipo en ataque.

El primer estuvo marcado por la falta de una referencia clara en defensa del Grupo 2002 y Cantur se lo llevó por 24-26. La fortaleza en el bloqueo decantó el segundo, con una primera linea muy fuerte con Priscilla, Regla Bell y Sekulic. Pero ante tanta igualdad, y con la previsión de un choque muy igualado, de nuevo las canarias tomaron ventaja a través de la eficacia de Sykora en la recepción y la efectividad de Trombitas en la colocación. Para aumentar la presión hasta límites insospechados, el Grupo 2002 le demostró a Cantur que va a tener que sudar y mucho para colarse en la final y en la Champions League.

Ana Ibis Fernández se dejó ver en el cuarto (25-15) para asustar al rival ante el set definitivo. Pero cantur tiró de fortaleza mental y física para llevarse el partido, ante unas muy malas opciones de las murcianas en ataque y casi sin respuesta en el trabajo defensivo durante el set final.

La primera lectura de la derrota pasa por lo complicado que se le ha puesto el acceso a la final al Grupo 2002, aunque en el lado positivo, se encuentra la capacidad de respuesta y el papel de Benidorm, el gran aliado de las murcianas. La batalla está abierta y aún queda mucha guerra.