López arma otro lío

«Mono con bolígrafo». Es el término que utilizó el alcalde de Cartagena, José López, para descalificar públicamente a un redactor de 'La Verdad' que la semana pasada había firmado un par de artículos que no fueron de su agrado, entre ellos el que se reproduce a pie de página. Fue durante la gala de final de temporada de la federación de peñas del Fútbol Club Cartagena, que congregó en el auditorio de El Batel a futbolistas, directivos, técnicos, exjugadores, aficionados y políticos. Los peñistas del Efesé decidieron que el alcalde, que acudió al acto junto a su jefe de Comunicación, Ángel Tarifa; y al concejal de Deportes, Ricardo Segado, cerrara un acto eminentemente festivo con una breve alocución. Sin embargo, López sorprendió a todos los presentes (unas 200 personas) con un discurso en el que empezó llamando «mono con bolígrafo» al redactor de 'La Verdad' Francisco Javier Moya, presente en El Batel ya que estaba cubriendo el acto para este periódico. «Hay veces que le damos dos pistolas a un mono y otras veces nos equivocamos y le damos un bolígrafo. A pesar de lo que han leído por ahí, tengo que tranquilizar a los aficionados y a los futbolistas, ya que por supuesto que el FC Cartagena va a tener una subvención y contará con su dotación económica para la próxima temporada. Todo está subsanado. El club ya lo sabe, aunque nunca ha tenido dudas y ya sabía desde el primer momento que el apoyo del Ayuntamiento está totalmente garantizado», soltó López con tono vehemente.

El alcalde, que convirtió un acto festivo en una especie de mitin político, continuó diciendo que «se reivindicaba a través de algún periodista que el Ayuntamiento avanzara en la construcción de campos de césped y yo voy a aprovechar la presencia aquí del director general de Deportes [Alonso Gómez López, que estaba entre el público] para lanzar un órdago, porque yo soy un alcalde reivindicativo. Si la Federación, que es propietaria del Mundial 82, paga un campo y la Consejería paga otro, este Ayuntamiento paga un tercero. A ver si mañana, el titular claro, en negro sobre blanco, es que el Ayuntamiento se compromete, no solo a hacer lo suyo, sino a apoyar a otras instituciones para que los niños tengan unas instalaciones deportivas del siglo XXI, y no del siglo XIX».

«¡Te jodes!»

Al terminar el acto, y mientras los camareros servían ya un ágape a los invitados, el redactor de 'La Verdad' aludido por López durante su discurso se acercó educadamente al alcalde e intentó, en tono cordial y afable, expresarle su malestar por el desafortunado calificativo que había usado. «¿No te ha gustado? Pues te jodes. ¡Te jodes! Te has metido con un crío de 25 años. ¡Eres una mala persona!», fue lo primero que le dijo López a Moya, quien intentó reconducir la situación y recordarle que estaba dispuesto a aclarar cualquier duda con él, y con su concejal de Deportes, en ese mismo momento o en cualquier otro. Sin embargo, López se negó a hablar con Moya y fue perdiendo los nervios poco a poco, levantando cada vez más la voz y faltando al respeto al periodista.

Así, a la vista de todos y con muchos de los presentes ya solo atentos al desagradable episodio, cuando Moya le dijo al alcalde que se estaba comportando «como un impresentable», que ya estaba bien y que parara de insultarle, López perdió el control por completo y le dijo textualmente: «A mí no me levantes la mano. Vamos a salir a la calle y vamos a ver si allí me vas a levantar la mano a mí. En la calle lo arreglamos». El periodista se apartó, pero aún hubo tiempo para que el edil de Deportes, Ricardo Segado, empeorara las cosas. Se acercó al periodista y tocándose el rostro le dijo: «Tienes la cara muy dura, Francis, eres un caradura». En ese momento, varios de los que estaban por allí intervinieron y se llevaron al redactor de 'La Verdad' de ese lugar.

Ayer, pasadas las horas, no hubo disculpa pública ni privada del alcalde, quien sostiene que no insultó al periodista y que fue «perseguido» tras el acto. Este feo incidente se suma a otros similares protagonizados anteriormente por López. El último de ellos tuvo lugar el pasado 2 de abril en el palco del Pabellón Central, durante el partido de fútbol sala entre el Plásticos Romero y el Hércules.

La celebración de uno de los goles por parte de un directivo del Hércules desató la ira de López, quien afeó al dirigente alicantino el gesto y, en ese momento, comenzó un intercambio de insultos y amenazas que no pasó a mayores porque sujetaron al alcalde de Cartagena y los directivos alicantinos abandonaron sus asientos en el palco y desaparecieron de la escena.