Rebajan la pena a una joven al admitir que le clavó un cuchillo a su marido

La Audiencia Provincial de Murcia cerró ayer con un acuerdo de conformidad el intento de homicidio que se produjo en Santomera en el otoño de 2013. La joven María José F.F., que se encuentra en avanzado estado de gestación, fue condenada finalmente a una pena de un año y cuatro meses de prisión. Una condena inferior a los dos años y tres meses de cárcel a los que se enfrentaba inicialmente y que, además, podría quedar en suspenso, tal y como ayer solicitó su defensa. La Fiscalía no se opuso a la petición.

Los hechos que llevaron a esta veinteañera al banquillo ocurrieron el 1 de noviembre de 2013 en su vivienda de la Calle Pantano de Santomera. La joven se encontraba, al parecer, pelando patatas para preparar la comida cuando surgió una discusión con su marido por motivos que no han trascendido. Según explicó la procesada durante la instrucción, él la empujó -estos hechos fueron estudiados en un juzgado de violencia de género y se archivaron-y ella le lanzó el cuchillo que llevaba en la mano, clavándoselo en la espalda. La lesión se produjo en una zona donde están alojados órganos vitales, por lo que esta acción, con la que causó a su marido una herida penetrante en el hemitórax y que le ha dejado una cicatriz como secuela, fueron considerados un intento de homicidio.

Aunque la joven sostuvo inicialmente ante el tribunal que se había tratado de un «accidente», finalmente, a preguntas del tribunal, reconoció los hechos, cerrando así el acuerdo entre la defensa -ejercida por la abogada María José Melero- y la fiscal del caso. María José F.F. fue condenada finalmente a un año y cuatro meses de prisión por un delito de tentativa de homicidio con la agravante de parentesco.

El Ministerio Público tuvo en cuenta, a la hora de reducir su petición de pena, el reconocimiento de los hechos y los problemas mentales que sufre la acusada, por los que pidió la aplicación de una eximente incompleta. El tribunal debe decidir ahora si la pena, de un año y cuatro meses, queda en suspenso bajo la condición de que la mujer -que aseguró no tener antecedentes penales- no vuelva a delinquir en un plazo de dos años.

«No lo podré ver nacer»

La víctima de estos hechos, el aún marido de la procesada, aseguró a este diario, a las puertas de la sala de vistas, que no existió realmente tal agresión y que todo fue un «accidente». El hombre, que no llegó a declarar en la vista al cerrarse un acuerdo de conformidad, añadió que había tratado de poner fin al procedimiento contra su mujer, pero que, pese a sus esfuerzos, había continuado.

La condena a María José F.F. incluye, además, una orden de alejamiento de su marido del mínimo que contempla la ley: 2 años y 4 meses. Una medida que, explicó la representante del Ministerio Público, prácticamente ya ha cumplido -dado que supuestamente está en vigor desde noviembre de 2013, cuando se produjeron los hechos-. Menos de un mes de alejamiento, precisó la fiscal, quedaría pendiente de cumplir por la mujer. Una situación cuando menos llamativa, dado que ambos siguen casados -pese a que la mujer aseguró que actualmente vive con un familiar- y ella se encuentra en avanzado estado de gestación.

El marido de la acusada mostró a las puertas de la sala su deseo de que esta orden de alejamiento se levante cuanto antes. «No voy a poder ver nacer a mi hijo», remarcó.