Bernal dice que otro plan de ajuste está «dentro de la normalidad»

El consejero de Hacienda, Juan Bernal, manifestó este miércoles que la posibilidad de tener que elaborar un nuevo plan de reequilibrio durante los primeros meses de 2014 entraría «dentro de la normalidad» y de la legalidad vigente. En declaraciones a la prensa previas a su comparecencia ante el pleno de la Asamblea Regional para hablar de los presupuestos del próximo ejercicio, Bernal reconoció que el Gobierno autonómico tendrá «dificultades» para cumplir con el objetivo de déficit del 1,59 por ciento del PIB fijado para 2013. Por eso, indicó que, al igual que se ha hecho en años anteriores y en otras comunidades autónomas, si al finalizar el año se comprueba que finalmente se ha superado el objetivo fijado, la Región estará «en la obligación legal» de presentar ese plan de reequilibrio en los meses de abril o mayo. «Debemos vivir el presente, no pensar ahora en mayo de 2014, sino seguir luchando por lograr el déficit más bajo posible», dijo, y ha aseguró que «aún queda mucho año» por delante y que no se puede conocer a día de hoy en qué situación de déficit se terminará el ejercicio.

Los problemas que está sufriendo la Región para controlarlo, señaló, se deben fundamentalmente a que se ha apostado por mantener los servicios esenciales públicos como la sanidad, educación, políticas sociales o universidades «con un nivel de calidad alto a pesar del desplome de los ingresos». Además, indicó, el sistema de financiación autonómica «perjudica seriamente» a los ingresos de Murcia, situándolos por debajo de la media del resto de autonomías.

Por último, com,entó que desde la Región se está informando de manera real y transparente de las cifras de déficit, algo que en su opinión puede que no se esté haciendo desde otras regiones, donde en septiembre se habló de que su déficit era del 1% y, sin embargo, alegaron que no cumplirían con el límite del 1,59 por ciento. «En esos casos, el dato oficial de déficit no responde a la realidad de esas comunidades», criticó, e insistió en en que aunque la Región tendrá dificultades para cumplir el objetivo, «no hay ninguna batalla perdida».