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G. MÁRMOL
Miércoles, 30 de septiembre 2009, 11:18
La visita que el Rey de España realizó ayer a la Flotilla de Submarinos del Arsenal de Cartagena se convirtió en un reconocimiento al trabajo de la tripulación del , que con sangre fría y la pericia que da el adiestramiento evitó una tragedia cuando el buque sufrió una grave vía de agua haciendo maniobras cerca de Cabo Tiñoso, hace diez meses.
Don Juan Carlos llegó al campo de deportes del Tercio de Levante de Cartagena pilotando un helicóptero del Grupo 45 que tomó en el aeropuerto de San Javier. Tras pasar revista a los marinos y marineros de la Flotilla, asistió a una breve charla en la que el capitán de navío Francisco Javier González-Huix y otros mandos le expusieron la realidad del arma. La flotilla está compuesta por cuatro sumergibles de la clase S-70, de los que dos están en el dique seco por reparaciones. En un par de años, la Armada dispondrá del primero de los buques de la clase S-80 que se construyen en el astillero cartagenero de Navantia.
Visita a los simuladores
Los simuladores de la Base de Submarinos también fueron visitados por el Rey. Todas las dotaciones se adiestran en esas tres máquinas en operaciones tácticas, de propulsión y de navegación. Don Juan Carlos pudo seguir en apenas un minuto un ejercicio de salida a la superficie de una nave afectada por una vía de agua a cien metros de profundidad.
Se trata de ejercicios para aprender a reaccionar en situaciones extraordinarias que a veces se dan. El fue el último sumergible que se vio en una situación similar: sufrió una vía de agua en su cámara central por la rotura de una pieza del casco cuando se encontraba a 300 metros de profundidad. Fue el pasado mes de diciembre en aguas de Cabo Tiñoso y las órdenes precisas de su comandante, el capitán de corbeta Francisco Javier Montenegro Rey, y la pericia de toda la tripulación evitaron una tragedia.
Por eso, el Rey saludó y felicitó ayer uno a uno a todos los tripulantes del formados ante el buque, y se interesó por el trabajo que desempeñan.
Los últimos minutos de la visita los empleó don Juan Carlos en saludar al presidente de la Comunidad Autónoma, Ramón Luis Valcárcel; al de la Asamblea Regional, Francisco Celdrán, al delegado del Gobierno, Rafael González Tovar, y a la alcaldesa, Pilar Barreiro. Ante ellos, el monarca preguntó por los efectos de la última gota fría.
El jefe de las Fuerzas Armadas estuvo acompañado por el almirante jefe del Estado Mayor de la Armada, Manuel Rebollo; el almirante de la Flota, el cartagenero Juan Carlos Muñoz-Delgado; el almirante de Acción Marítima, Emilio Nieto Manso, y el vicealmirante del Arsenal, Jorge Rosety.
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