Roban en la guardería Eliosol y se llevan como 'botín' las peras del almuerzo

La guardería Eliosol, dependiente de la Comunidad Autónoma y ubicada en el barrio de San Cristóbal, volvió a ser asaltada en la madrugada de ayer. Ésta es, según fuentes del centro escolar infantil, la octava vez en que la guardería es robada en los últimos años. En esta ocasión los cacos se llevaron como botín las peras que los pequeños iban a consumir en el almuerzo de ayer.

Del robo se dieron cuenta a primera hora cuando el personal y los profesores del centro infantil llegaron a él. «Todo estaba revuelto, por lo que de inmediato dedujimos que nos habían vuelto a robar», afirmaba ayer uno de los trabajadores. «Esta vez, ¯añadió¯ no se han llevado los equipos informáticos, pero no han dejado nada en su sitio».

En la cocina, según uno de sus trabajadores, también ocasionaron algunos desperfectos. «La nevera estaba abierta y nos dimos cuenta que faltaba la fruta, peras, que teníamos previsto dar a los niños como postre», explicó. De las aulas también se llevaron, según contaron, «varias bicicletas pequeñas, tractores y camiones de plástico de gran tamaño que los niños utilizan durante sus juegos».

Del nuevo incidente se lamentaron todos ellos, por tratarse de «una situación que se ha convertido en algo habitual que se repite con demasiada frecuencia». Ayer, al mediodía, volvieron a cursar la preceptiva denuncia en la Comisaría del Cuerpo Nacional de Policía. Los equipos informáticos no pudieron ser robados, ya que se encontraban en armarios blindados que fueron adquiridos por la Concejalía de Educación, según el edil responsable, José Joaquín Peñarrubia, quien afirmó que se han colocado rejas en el centro y otras medidas solicitadas por los padres y profesores para evitar nuevos asaltos a la guardería.

A primera hora, todo el personal del centro se puso manos a la obra para que todo estuviera en perfectas condiciones para recibir a los pequeños. «Esta vez han respetado un poco más el material y no lo han dejado todo tirado por los suelos como en ocasiones anteriores». Entre los robos más virulentos a las instalaciones está el sucedido a finales de enero pasado. «Ya hemos perdido la cuenta por las veces que nos han robado. Creo que han sido ocho en total, aunque otras veces sólo han entrado».