Muere un hombre de 74 años en una playa de Torrevieja en la que su nieta estaba como socorrista

La playa del Cura de Torrevieja fue ayer escenario de un verdadero drama. Una mujer lloraba desconsolada sobre el cuerpo inerte y cubierto con una sábana blanca de su marido, de 74 años, que había sido rescatado unos instantes antes del mar. Según las fuentes consultadas, el hombre, que era al parecer un nadador experimentado, fue localizado por otras dos personas en la denominada zona de las piscinas, un punto de esa playa no habilitado para el baño y sobre el que el puesto de vigilancia de Cruz Roja no tiene visibilidad.

La víctima fue evacuada hasta la arena ya sin pulso. Una trágica casualidad quiso que su nieta llegara a prestarle los primeros auxilios, ya que estaba trabajando precisamente como socorrista en esa misma playa. A las maniobras de reanimación se sumó una médico que se encontraba entre los bañistas. Posteriormente llegó el personal del Samu, pero sólo pudo certificar la defunción.

Los primeros indicios apuntan a que el hombre pudo experimentar una indisposición o quedarse sin fuerzas tras nadar un buen rato. De hecho, la facultativa que lo atendió en un primer momento explicó que no había expulsado agua de los pulmones, lo que conduce a pensar que el bañista sufrió un problema cardíaco.