Corrupción ladrona

Asistimos estos días los ciudadanos de bien que creemos en la libertad y en el Estado de Derecho a un espectáculo, casi pornográfico por su indecencia, de lo que es la utilización política más chabacana de los resortes del Estado como si fueran un apéndice del Partido Socialista.

Me refiero al escándalo de las escuchas telefónicas que no es otro que el de la violación de los derechos civiles más elementales de los cargos populares, cuyas intimidades vemos a diario escarnecidas y vilipendiadas por unas escuchas telefónicas, cuya filtración interesada, no tiene más objeto que asesinar civilmente el honor de los miembros del Partido Popular que con tanta ilusión trabajamos para los murcianos cada día. Filtraciones, cuyo contenido, nadie sensato ve que sea, en principio, penalmente relevante para sumario alguno y lo que cabe preguntarse es quién y para qué las pidió y por qué se autorizaron con tanta ligereza. En su momento habrá que pedir responsabilidades por este atropello.

Yo reto a cualquiera, ya sea arquitecto, mecánico, albañil, abogado, periodista, estudiante, fiscal, juez, político o policía a que se deje grabar sus conversaciones íntimas (esas que protege nuestra Constitución) a ver qué sale. Y que luego se publiquen extractadas en su parte más jugosa ¿Qué le parece la idea al querido lector? ¿A que todos hablamos por teléfono con amigos en confianza y les contamos intimidades sabiéndonos protegidos por el Ordenamiento Jurídico?

Eso ya no es así. El Partido Socialista de Zapatero se lo ha cargado, sobre todo en la Región de Murcia. Han puesto en marcha un plan en tres fases .

La primera fase, por burda, con Saura y compañía presentando querellas a troche y moche contra todo lo que se moviera del PP, cayó en las municipales estrepitosamente. Yo ya fui víctima de esa fase, fui imputado por la Fiscalía de un inexistente delito y absuelto, e incluso se falsificaron actas municipales para crearme un también inexistente escándalo urbanístico a costa de mi casa y de mi intimidad por el que fueron condenados dos concejales socialistas. Bien, esa fase inicial se cerró con 19 archivos de querellas a favor del PP y la confianza renovada de los murcianos en el mejor presidente que ha tenido esta Región.

Estamos en la segunda, mejor diseñada pero igual de burda porque no nos vamos a callar. Aquí es más sibilino todo. Se ha empezado por crear una unidad especial de la Guardia Civil, por parte del ministro Rubalcaba, que curiosamente, como él mismo reconoció, sólo opera allí donde gobierna el Partido Popular (como si Chaves no tuviese familia en Andalucía). Del heróico cuerpo de la Guardia Civil no tengo ni la más mínima queja, sólo admiración por su heroísmo y entrega, ellos son lo mejor de la nación española. Pero sí del personaje que han puesto al mando de esta unidad, al que el ministro tiene para perseguir políticamente al PP allá donde gobierna.

Este personaje es el coronel Hernando, que fue la mano derecha del encarcelado Rafael Vera y procesado en la Sección 26 de la Audiencia Provincial de Madrid por los GAL ( que para el que no lo recuerde fueron los escuadrones de la muerte que se crearon en tiempos de los gobiernos socialistas de González para la guerra sucia contra el terrorismo y que hundió la lucha antiterrorista muchos años) por presuntamente llevar a Suiza maletines con fondos reservados .Este es el que Mesquida y Rubalcaba anunciaron a bombo y platillo en octubre de 2006 que se encargaría de mandar esta unidad especializada en perseguir la supuesta corrupción en Madrid, Murcia y Valencia, gobernadas por los populares.

Como decía, el coronel Hernando, junto con las instrucciones que da el Fiscal General del Estado, nombrado a propuesta del Gobierno y que es el vértice de la pirámide fiscal(a diferencia de los jueces, los fiscales actúan por principio jerárquico, es decir, por orden e instrucciones de su superior, que como digo es nombrado por el Gobierno y dependientes del número uno de la lista por Murcia del PSOE, el Ministro señor Bermejo) son los encargados de esta fase que es la de pedir escuchas a cargos populares y presentar acusaciones contra ellos. Esta fase, en Murcia lleva ya 34 archivos a favor del PP.

La tercera fase, ya la adelantó Bermejo la semana pasada: echar al PP del Gobierno regional. Y lo ven fácil pues están intentando convertir lo que queda de legislatura, a falta de un proyecto para la Región, en un vertedero jurídico-político que se trague, a ser posible el honor, la honradez y la credibilidad de los que a diario trabajamos para nuestra tierra y para los murcianos bajo las siglas del PP.

Esta debe ser la democracia avanzada de Zapatero, la de perseguir al discrepante violando incluso los derechos fundamentales de los políticos no afines, filtrando a los medios transcripciones ajenas incluso al sumario (pues en el sumario sólo se deben admitir las grabaciones relevantes, lo que hace sospechar que las fuentes podrían venir del que las hizo, es decir, del Ministerio del Interior o del de Justicia) en un ejercicio totalitario que, probablemente en un país anglosajón ya habría dado en la cárcel no con los huesos del escuchado, sino con los del solicitante y los del autorizador de la escucha.

Esta debe ser, sí, la democraZia avanZada que envía faxes a los periódicos con transcripciones que, como decía, no constan en los sumarios y a las que sólo tienen acceso los sujetos de la segunda fase descrita y que no tienen otro fin que la destrucción y la muerte civil como personas de alcaldes y cargos populares para llegar sin proyecto al Gobierno de la Región.

No lo vamos a consentir. A la tercera fase le queda pasar por la segunda bis, que es arrollar a un partido sólido, honrado y ejemplar cuyos miembros han dado incluso la vida por España sin pestañear para defender la libertad de todos. Esto no les va a salir gratis ni lo vamos a permitir.

Termino. Como verán no he comentado el contenido de las conversaciones. Me niego a aceptar que la romanización y la libertad alguna vez llegaron a España. Me niego a aceptar que se pueda sacar petróleo de la violación de derechos humanos fundamentales. Me niego a escuchar lo que se ha autorizado y grabado con tanta ligereza. Me niego a clavar el puñal de la lectura en la intimidad de nadie. Hay demasiada corrupción, y no en el Partido Popular. El dinero se devuelve; el honor, no. Hay demasiada corrupción ladrona y asesina de honra. En marzo, hará las maletas, con Zeta.

Luis Gestoso de Miguel es presidente de la Comisión de Medio Ambiente del PP LA VERDAD