Kim Kardashian, acusada de ser espía

El encargado de la Unidad de Delitos en el Ciberespacio de la Guardia Revolucionaria de Irán tiene claro que Kim Kardashian es una espía de Instagram que se encarga de coaccionar a "jóvenes y mujeres" iraníes con sus publicaciones en Instagram.

La locura que se le ha ocurrido a Posdarán, un ejército revolucionario extremo de Irán, y tiene su propia argumentación para afirmar que Kim Kardashian actúa como espía. Mostafa Alizadeh mantiene que la empresaria tiene un complot con el jefe de Instagram, quien le diría "haz esto o haz lo otro", aprovechando el gran número de seguidores que tiene.

Según explicaciones de Alizadeh, Kim Kardashian tiene el encargo de corromper a la sociedad joven iraní con su "estilo de vida opuesto al islam". Aunque todo esto parezca una locura, este ejército se toma muy en serio a las personas que, como Kim Kardashian hacen alarde de un estilo de vida promiscuo.

En la actualidad, según informa Vanity Fair, este ejército iraní tiene abierta la "Operación araña 2", que combate esas "irregularidades", investigando un uso de Facebook e Instagram que consideran ilícito. Por el momento, el Posdarán ya tiene señaladas como sospechosas a 170 personas y persiguen a 29 de ellas. Además, han detenido a los responsables de 150 páginas de Facebook (50 peluquerías, 50 tiendas de moda y 50 estudios fotográficos) por "promover la cultura de la promiscuidad, debilitar y rechazar la institución familiar, ridiculizar los valores religiosos y promover las relaciones fuera de las reglas morales y publicar fotos privadas de mujeres".

Kim Kardashian no es la única famosa que se ha visto afectada de estas graves acusaciones, que la empresaria deben hacerle gracia. Otras modelos de ascendencia iraní o de algún país colindante a éste o con raíces musulmanas ya han sufrido la persecución del Posdarán. La modelo Elham Arab fue una de las detenidas y obligada a dejar las redes sociales. Sus últimas declaraciones fue su perdón público: "Iniciarse en las redes sociales es libre, pero salir de ellas no. A todo el mundo le gusta la belleza y la fama, pero es importante saber el precio que se puede pagar por ello".