Charles Perrault, el padre cuentacuentos de la historia

Charles Perrault tenía un don: era capaz de trasladar a un mundo de fantasía la historia más turbia y triste. Este escritor francés estudio abogacía, como su padre, pero le apasionaba escribir. Viviendo en una época donde los ánimos estaban bastante revueltos, la pobreza y la delincuencia se alternaban con la alegría y la exaltación de la libertad tras años de opresión en la Edad Media. Charles Perrault se encargó de hacer que todo pareciera más rosa con sus historias.

El escritor francés al que hoy rinde homenaje Google fue el autor de cuentos de cabecera de todos los niños del mundo. Cuentos por los que Disney se interesó y llevó a la gran pantalla. Los cuentos de Charles Perrault son los clásicos no de una generación, sino de la historia. 'La Cenicienta', 'El gato con botas', 'Pulgarcito', 'La bella durmiente' y muchos más, son cuentos que han emocionado.

Pero la inteligencia de Charles Perrault iba mucho más allá de estos simples cuentos infantiles. En cada una de una de sus historias hay una lección moral, una moraleja que se traduce de cada cuento; se trata de cuentos educativos. Charles Perrault vivió la delincuencia la maldad de la gente en sus carnes y quiso trasladar lecciones de moral a través de sus cuentos para que los niños aprendiesen desde muy pequeños.

Así mismo, lo que Charles Perrault hizo, aquello por lo que pasó a la historia, fue precisamente por crear una alegoría del mundo real a través de sus cuentos. Los ogros, los lobos, las princesas, las madrastras, las hadas, todos los personajes inventados de sus historias tenían su representación en el mundo real. Así bien, algunas de sus historias son metáforas de la vida; por ejemplo, la princesa que se pincha con la rueca y sangra representa la madurez, el período femenino.

Otra características de los cuentos de Charles Perrault eran sus finales felices. Cualquier historias del escritor francés tenía un desenlace positivo, lleno de alegría, "fueron felices y comieron perdices" era la filosofía de sus cuentos. Su intención era dejar un buen sabor de boca a una sociedad con miedo.