Duke Kahanamoku, el dueño de las olas y, hoy, de Google

Duke Kahanamoku nación en 1890 en las paradisíacas islas de Hawaii y desde muy joven estuvo pegado a una tabla de surf. "Papa nui" fue el nombre con el que Duke Kahanamoku se refería a esa amiga inseparable con la que surcaba las olas de la costa hawaina. Ahora, su magia con "papa nui" lo ha llevado directo al doodle de Google.

El logo de Google pasa a convertirse en una tabla de surf con la cara de Duke Kahanamoku grabada en su interior. Los motivos hawaianos no podían faltar para honrar al que fue uno de los mejor surfistas del siglo XX. Su nombre puede resultar algo desconocido para muchos, sin embargo, los amantes de este deporte marítimo seguro que les suena el nombre del que fue el pionero en practicar el surf tal y como hoy lo conocemos.

Duke Kahanamoku participó en varios Juegos Olímpicos con la selección estadounidense, aunque antes de tocar el oro con sus manos tuvo que demostrar su valía sobre su "papa nui" cabalgando las olas del océano Pacífico. Batió varios records que a algunos incrédulos les costaba terminar de convencer, pero con los años, Duke Kahanamoku terminó siendo una eminencia en el deporte acuático.

Duke Kahanamoku también fue socorrista y trabajó al lado del equipo de natación y el de waterpolo para controlar la seguridad de los participantes. Sin embargo, su hazaña más destacada en cuante a rescate se refiere la protagonizó un día cualquiera en una playa californiana. Duke Kahanamoku rescató a siete pescadores cuyas vidas corrían peligro al hundirse el pesquero en el que viajaban y que naufragó frente a la cosa. El surfista los rescató uno por uno con ayuda de su tabla, otros 17 murieron en el naufragio. La rápida actuación de Duke Kahanamoku provocó que la tragedia no fuera tan grande; desde entonces, todos los socorristas de esa costa utilizan tablas de surf en su trabajo.

El que hoy corona la página principal de Google, recorrió las olas más altas de California y Hawái. El doodle que hoy conmemora la figura de Duke Kahanamoku se podría decir que es la última ola a la que suma el surfista para navegar, en este caso, en la red de Internet.