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Escena de la película 'UP'.
Un chico vuela con 110 globos de helio atados a una silla

Un chico vuela con 110 globos de helio atados a una silla

La aventura formaba parte de una campaña publicitaria de su empresa de limpieza y tenía previsto aterrizar en el festival de rodeo de Calgary

C. PATRICIO

Jueves, 9 de julio 2015, 14:08

Seguro que a más de uno se le ha pasado por la cabeza intentar volar como hace el protagonista de la emocionante cinta de animación de Disney , 'UP', que consigue hacer que su casa flote por los aires con numerosas cantidades de globos de helio.

Daniel Boria, un canadiense de 26 años, parece haberlo coseguido. Con algunos matices, claro. El joven ató 110 globos de helio a una silla de plástico y consiguió volar como hace el señor mayor de 'UP' con el fin de aterrizar en el recinto del festival de rodeo de Calgary, Canadá.

Pero su aventura duró poco, ya que nada más tocar tierra fue detenido por haber puesto su vida en peligro. La hazaña formaba parte de una campaña publicitaria de la empresa de limpieza para la que Daniel Boria trabajaba.

El chico intentó lanzarse con el paracaídas desde la silla de plástico con la que volaba y aterrizar en el Calgary Stampede, un festival anual de rodeo que todos los años atrae a miles de personas. Pero, como cuenta a la cadena estadounidense de noticias CBC, que no pudo controlar muy bien la dirección debido al tiempo que hacía y se vio obligado a aterrizar en un campo industrial a pocos kilómetros del evento, como tenía previsto.

«Llegó un punto en el que yo estaba mirando a los globos y estos empezaban a explotarse, la silla se movía y podía ver a mis pies colgar encima de las nubes a 747 metros de altura justo antes de aterrizar», contaba Daniel Boira a la cadena.

Al final fue alcanzado por la policía de Calgary y detenido hasta el domingo por la mañana. «Todo el mundo se rió y estuvo pensando en el tipo que sobrevolaba la ciudad con globos en una silla, pero luego, cuando lo piensas, en realidad es una acción muy irresponsable», reconoció el inspector Kyle Grant al diario local The Chronicle Herald.

Esta pequeña gran epopeya, que Boria ya podrá contar a sus nietos, le ha costado 20.000 dólares de multa, lo que se habría gastado a su compañía en alquilar un avión que sobrevuele el recinto del festival con una banda publicitaria. Y además del arresto, la broma también le ha causado un esguince en el tobillo.

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